jueves, 17 de septiembre de 2015

Federico García Lorca: Son de negros en Cuba



Santiago de Cuba al atardecer
Foto: Wikipedia, la enciclopledia libre

Cuando llegue la luna llena 

iré a Santiago de Cuba. 

Iré a Santiago. 

En un coche de agua negra. 

Iré a Santiago. 
Cantarán los techos de palmera. 
Iré a Santiago. 
Cuando la palma quiere ser cigüeña. 
Iré a Santiago. 
Y cuando quiere ser medusa el plátano. 
Iré a Santiago. 
Con la rubia cabeza de Fonseca. 
Iré a Santiago. 
Y con el rosa de Romeo y Julieta. 
Iré a Santiago.
Mar de papel y plata de monedas.
Iré a Santiago. 
¡Oh Cuba, oh ritmo de semillas secas! 
Iré a Santiago. 
¡Oh cintura caliente y gota de madera! 
Iré a Santiago. 
¡Arpa de troncos vivos, caimán, flor de tabaco! 
Iré a Santiago. 
Siempre dije que yo iría a Santiago 
en un coche de agua negra. 
Iré a Santiago. 
Brisa y alcohol en las ruedas. 
Iré a Santiago. 
Mi coral en la tiniebla. 
Iré a Santiago. 
El mar ahogado en la arena. 
Iré a Santiago. 
Calor blanco, fruta muerta. 
Iré a Santiago. 
¡Oh bovino frescor de calaveras! 
¡Oh Cuba! ¡Oh curva de suspiro y barro! 
Iré a Santiago.



2 comentarios:

  1. Leer este poema es una gozada. Soy un gran admirador de García Lorca y tengo el honor y la suerte de haber conocido a Dulce María Loynaz en cuya casa de hospedó en La Habana y he visto fotos y cartas autógrafas que se cursaron. Gracias por publicar este poema que ya es hora de que alguien le ponga música. Un abrazo cordial.

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  2. Me alegran tus comentarios. Luis Carbonell lo tenía en su repertorio. Un abrazo.

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