En el centro de Madrid, en una de las esquinas de la Plaza de
Cibeles; entre las calles de Alcalá y el Paseo de Recoletos existe un jardín
vallado que llama la atención por su frondosidad, es tan bello que rápidamente
se desea visitar. Lo que muchos no conocen, es que este maravilloso vergel,
oculta un palacio, testigo de la historia militar y política española desde hace dos siglos. Hoy
sede del Cuartel General del Ejército. En otros tiempos Palacio de la Duquesa
de Alba, Ministerio de la Guerra, Ministerio del Ejército, que fue habitado por
cardenales y reyes.
En sus orígenes la propiedad estuvo cercada por un muro.
El bonito enrejado que contemplamos hoy,
y el estilo paisajista del jardín, se realizó después de 1870. Con
anterioridad, José Bonaparte, ordenó la construcción de una escalera por la que
se accedía al palacio y un jardín geométrico de estilo francés. Hoy, si nos
detenemos a contemplar el jardín desde la puerta de acceso de la calle de
Alcalá, seguimos contemplando esta escalera y los parterres que la circundan. En el paseo
central que nos conduce a ella, se distingue una estatua dedicada al Valor, obra de José Alcoverro.
Foto: Arte en Madrid artedemadrid.wordpress.com |
Foto: J.Laurent. Ministerio de la Guerra. Antes de 1863 (memoriademadrid.es) |
Desde esta puerta, al fondo de la escalera, se aprecia las
bases de una construcción. Sólo desde el interior o si se sube a las terrazas
del bello edificio de Correos; hoy Ayuntamiento de la capital, o a la del círculo de Bellas Artes, se puede
contemplar en su totalidad, el gran completo de edificios situado entre las
calles de Alcalá, Barquillo, Prim y el Paseo de Recoletos, entre los que
destaca el Palacio llamado de Buenavista con varios patios.
Se cita en el primer párrafo que el palacio de Buenavista ha
sido testigo de la historia militar española. El que existió al principio, a
mediados del siglo XVI no es comparable al actual. Una casa palacio, construida
en el Altillo del llamado de Buenavista, por las que se divisaban desde la
pequeña colina. Rodeada de huertas y
olivares, propiedad del cardenal Quiroga, cercana al camino de Alcalá.
Cuando Felipe II traslada la Corte a Madrid, haciendo de la
ciudad la capital del reino, el propietario del pequeño palacio, se lo cede al rey,
al que debía su nombramiento como Arzobispo de Toledo e Inquisidor del Reino, y
encontrarse él en Nápoles. Este utiliza la propiedad como lugar de recreo y
descanso durante las obras de rehabilitación como vivienda del Alcázar.
Cambió de manos varias veces, siendo utilizado por Felipe
III, Diego de Silva y Mendoza, los Jesuitas, el Marqués de la Ensenada, Isabel
de Farnesio; segunda esposa de Felipe V, que vivió en él hasta su muerte. Fernando
Silva y Álvarez de Toledo, XII Duque de Alba; su famosa nieta Mª del Pilar
Teresa Cayetana y Silva y Álvarez de Toledo, XIII Duquesa de Alba, que lo manda
derribar y ordena construir uno nuevo, es
el que ha llegado hasta nuestros días, aunque de menor altura.
A la muerte de la Duquesa lo heredan sus médicos y sirvientes,
que no logran mantenerlo. Lo adquiere el Ayuntamiento que lo dona a Manuel de
Godoy, sin que llegara a utilizarlo y al incautarle los bienes pasa a ser
propiedad del Estado.
Durante la guerra de la Independencia lo ocupa el general
Murat. Fernando VII lo dedica a Sede de la Inspección de Milicias, luego fue
museo de Artillería. En esa época se construye la escalera de honor que hoy
podemos ver, con su balaustrada de mármol gris, adornada con farolas, que
fueron las primeras en Madrid con luz eléctrica, instalada en 1882.
Fue vivienda del general Espartero cuando era regente de
Isabel II y del general Prim.
Foto: Marisa Caballero |
En la fachada principal del palacio, se distingue un frontón
con temas alegóricos. Llama la atención
la existencia de una planta superior, no es lo normal, los frontones coronan
los edificios. Se debe a las siguientes adaptaciones que ha sufrido el
edificio, que fue bombardeado durante la guerra civil. Ordenó, el general
Varela, la construcción de una planta más.
Inicialmente lo presidía un reloj, pero entre 1942 y 1944, se sustituye
por un grupo escultórico que representa, a la Patria en el centro, el guerrero
a su izquierda y la historia a su derecha.
A ambos lados de la puerta, dos esculturas, en homenaje a dos
insignes militares; Gonzalo Fernández de
Córdoba, El Gran Capitán; que se le
puede considerar, como creador del Ejército Español. Y a Rodrigo Díaz de Vivar,
conquistador de grandes territorios.
Foto Marisa Caballero |
Foto: Marisa Caballero |
Al final de la escalera, en su último rellano, por una puerta
situada a la derecha se accede al palacio. Sus salones, construidos al estilo
español, con balcones a la fachada principal y por una puerta que los comunica.
Foto: Marisa Caballero |
El primero es el llamado Salón de Ayudantes, que contiene
retratos de gran valor realizados por Maella y Van Loo. Destaca el realizado
por Federico de Madrazo, de carácter íntimo, es un retrato de una joven Isabel II que tiene en brazos a la entonces princesa
de Asturias, conocida por todos como La Chata.
Foto: Marisa Caballero |
Salón Teniers, llamado así por los tapices que
cuelgan sus paredes con escenas de campesinos holandeses, realizados por Van
Loo sobre copias de David Teniers. Salvo uno,
basado en el primer cartón que realizó Goya: La caza del Jabalí. Todos
ellos realizados en la Real Fábrica de Tapices, así como la alfombra que cubre
la sala, durante la segunda república y por encargo de D. Manuel Azaña.
Foto: Marisa Caballero |
Salón Goya, sus paredes están cubiertas con tapices
realizados en seda con temáticas goyescas: La era, La maja y los embozados, las
lavanderas y el columpio. En este salón,
en el centro, una mesa que fue utilizada
en el último Consejo de Ministros que
presidió Alfonso XIII y donde presentó su renuncia, y el primero de Azaña.
Igualmente se reunieron en esta sala la primera Junta de Defensa, presidida por
el general Miaja, que impidió la entrada en Madrid de las tropas franquistas,
tras la marcha del gobierno republicano a Valencia.
Salón de Audiencias, antiguo despacho del Ministro, la
mesa aunque de diferente estilo al de la época, se dice utilizó Felipe
V, por lo que se cree que es el tablero el que fuera el que utilizó. En este salón se encuentra el sofá con
tapicería original, en el que se realizaron las primeras curas al general Prim,
cuando el 27 de Diciembre de 1870, entró
gravemente herido después de sufrir un atentado en la calle de Turco, ahora
Marqués de Cubas y que aunque no se aprecia, manchó su sangre.
Salón de Batallas, Se llama así por sus cuadros que
reflejan batallas famosas.
Salón de Pasos
Perdidos, Se trata
de un distribuidor a varios salones.
Comedor de Gala, En este salón se encuentra el tapiz
más antiguo del palacio, con una de las escenas del Quijote: El desafío al
vizcaíno. Llama la atención que tratándose de una escena manchega, el molino
sea cuadrado, realizado sobre cartones de Procaccini y Sany. Este
comedor se sigue utilizando.
Salón Prim, en la pared un retrato del general
y un cuadro que representa la Batalla de Tetuán.
Salón Quijote, se dice que en él falleció el
general Prim. Es llamado así por los tapices que representan escenas del
Quijote.
Salón de Baile o
Embajadores, en este
salón estuvo la capilla ardiente del general Gutiérrez Mellado. En sus paredes
un retrato de Fernando VII realizado por Goya y otro del mismo rey por Vicente
López.
Todos los salones están iluminados por preciosas lámparas de
cristal de la Granja, cuenta con 90 relojes y un buen mobiliario, todo ello
perteneciente al Patrimonio Nacional.
Se puede visitar, aunque habrá que tener paciencia, ya que al
ser la sede del Cuartel General del Ejército; son muy pocos los días que se puede
acceder a él, por lo que hay una gran lista de espera.
© Marisa Caballero
Palacio de Buenavista por Marisa Caballero se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivar 4.0 Internacional.
Palacio de Buenavista por Marisa Caballero se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivar 4.0 Internacional.
MARISA:
ResponderEliminarBuena información completa y detallada. Hay también un palacio de Buenavista en Málaga (hoy Museo Picasso de la ciudad); también lo hubo en Cuba donde los condes de Buenavista .poseían grandes intereses. A ver si nos continúas descubriendo la traza de sus riquísimos itinerarios. Saludos.