II
He aquí, las labores
agrícolas mes tras mes:
Enero: Tiempo de lluvia, de
descanso, de limpiar las chacras, de hacer minga, de cuidar lo que se ha
sembrado, de recogida de camarones, de pesca, de gran escasez, de riesgo de
muerte…
Febrero: Continúa la lluvia
y en los llanos es tiempo de temblores de tierra. Lo sembrado va madurando y
hay que vigilarlo de los animales que lo acechan. Ya se puede comer verduras
sin que hagan daño. Hay que roturar tierras vírgenes, limpiar caminos, hacer
acequias, roturar tierras de barbecho, sacar piedras para la construcción de
casas, plantar viñas y sembrar la huerta.
Marzo: Sigue la vigilancia
sobre lo sembrado pero ya no solo de los animales sino también de los hombres.
Mes de gran abundancia. Se recogen granos, frutas, pescados, camarones, hongos
y se ponen a secar para tener provisiones en época de escasez. Los ríos traen
gran fuerza y riegan la parte más baja de los llanos, en los que es el momento
de sembrar.
Abril: Ya madura lo
sembrado. Continúa la vigilancia. En este mes engordan tanto los hombres como
las aves, los peces, el ganado, gracias a la abundancia de comida. Época de
vendimiar en los llanos. El vino es barato. La comida es cara en los llanos y barata
en la sierra. Tened en cuenta que en marzo es cuando se ha sembrado en los
llanos y en la sierra ya se está recogiendo el fruto de lo sembrado.
Mayo: Tiempo de segar, de
amontonar, de arrancar la mazorca, de desgranar el maíz. La mejor semilla de
maíz se utilizará para comer y la peor para chicha. La chicha es una bebida
alcohólica, hecha de pasta de maíz fermentado. Se guardan provisiones y se
teje. Los quesos son baratos en esta época. Según Guaman Poma se podría decir
que es el mes más importante del año. Los niños que nacen en este mes son ricos
y venturosos.
Junio: Tiempo de cavar la
papa y hacer chuño. Se siega todo el trigo del reino y se almacena en
depósitos. También se guarda fruta, pescados, toda la comida posible. Época en
que los funcionarios les visitaban para comprobar las reservas familiares de
víveres, hacer los censos de población y control de provisiones. Cieza de León
dice: «El principal mantenimiento de ellos es la papa, son como turmas de
tierra… las secan al sol y guardan de una cosecha para otras; y llaman a esta
papa, después de estar seca, chuno, y entre ellos es estimada y tenida en gran
precio…». El Padre Cobo habla: «… el tiempo de la cosecha de las papas es por
los meses de mayo y junio… pues, en cogiéndolas las tienden en el suelo, donde
les dé de día el sol y de noche los hielos, al cabo de doce o quince días se
ponen algo arrugadas, pero todavía muy aguanosas; entonces, para exprimirlas
las pisan muy bien y las dejan al sol y al hielo otros quince o veinte días,
con que quedan tan secas y livianas como un corcho, muy densas,
empedernidas tan encogidas que de cuatro
o cinco hanegas de papas verdes no sale más de una de chuñu… Es de tanta dura
el chuñu que aunque se guarde muchos años, no se pudre ni corrompe, y los
indios lo comen cocido en lugar de pan…». Al cocerlas se hidratan de nuevo.
Julio: Continúa la
recolección de frutas, verduras secas… Es el mes de comprar comida barata,
cebar cerdos, criar gallinas. Tiempo de guardar estiércol. Se dice que cada año
se hacía el reparto o redistribución de las tierras, cada nueva pareja recibía
un tupu de tierra, equivalente a una hanegada y media a lo cual se añadía otro
tupu por cada hijo varón y medio tupu por cada hija. Al realizarse un nuevo
matrimonio, la familia del hombre y la mujer perdían la fracción de tierra
correspondiente, mientras la joven pareja recibía una nueva parcela para su
sustento. Guaman Poma escribe en la página 212: «…En esta calle de la tercera
llamado punoc paya, biejas que entiende solo dormir y comer, de edad de ochenta
años… Con todo eso estas y otras tenían sus sementeras que hacía minga que le
ayudauan a beneficialle. Y ací no tenía necesidad de limosna las dichas biejas
y güerfanos que no pudían…»
Agosto: Mes de arar y
sembrar el maíz y trigo tempranero. Época de hacer el censo de ganado del
reino. En los llanos es el momento de podar las viñas. Las verduras ya no son
tan baratas pero siguen siendo sanas. Hay abundancia de comida por lo que no
hay enfermedades.
Septiembre: Tiempo de
sembrar el maíz al igual que la papa tempranera. También es el mes de trillar y
limpiar el trigo. A la vez que guardan sementeras para que los pájaros no
entorpezcan la siembra. Comienzan las enfermedades en la sierra y en cambio hay
salud en los llanos. Se empieza a comer de lo almacenado. El precavido que ha
sembrado de la papa tempranera tiene qué comer, quiénes no lo hicieron, hambre
hasta Navidad.
Octubre: Tiempo de ojear
sementeras. La tarea principal es la vigilancia tanto de noche como de día del
maíz y trigo para que los pájaros, perdices y zorros no hagan uso de ellos.
También es hora de cortar y amontonar leña y paja en espera del invierno. Se
sigue hilando y tejiendo como prestación de servicios, esta tarea es de hombres
y mujeres. Hay que trasquilar ovejas. Las casas deben cubrirse, es una labor de
mantenimiento en espera de la llegada del invierno.
Noviembre: Mes de sequía. Tiempo
de regar el maíz. Se oraba pidiendo lluvias. Se nombraba un juez de agua y
entre los alcaldes y jueces de acequias cuidaba que no faltara agua a dichas sementeras.
Es mes para sembrar verduras y plantar frutas para que cuando lleguen las
lluvias estén enraizadas y no se las lleve.
Diciembre: Tiempo de
sembrar papas, ocas, quinua… Si no se siembra en este mes ya no podrá hacerse,
pues comienza la época de lluvias. El padre Cobo escribe en el libro IV, capítulo V, página 163 que: «la
quinua es parecida a los bledos y que hay dos clases: blanca y colorada. La
blanca cuando no ha espigado, cuando está tierna la hierba se guisa igual que
se hace con las acelgas y las espinacas. La semilla de la quinua tiene
diferentes colores. La blanca se come como si fuera arroz y también molida. De
las otras semillas de colores se hace chicha. Al igual que la papa se da en tierras
muy frías». Las ocas son raíces comestibles. Las comen cuando están verdes ya
sea asadas o cocidas y también las ponen
a secar al sol para almacenarlas. Tienen un sabor como los higos
pasados.
Espero que les haya gustado
No hay comentarios:
Publicar un comentario