¿Quién te puso en mis días y en mis noches?
¿Por qué caminas a mi lado vigilante y al acecho?
Siempre presto para jugarme una mala pasada.
¿De qué te nutres?
¿De mi desdicha, de mi ira, de mi miedo y de mi rabia?
Me convences, me entretienes y me confundes.
Si quiero decir “sí”, un “no” planea por mi mente,
haciéndose asfixiante, opresivo y voceante.
Me atrapas sin ser muy consciente,
y me enredo en vanidades y odios
ajenos a mi mirada.
Mi existencia se canaliza en un llanto,
un desasosiego, una negra desesperanza.
La ansiedad zozobra por mis venas.
Y mi energía se diluye en mil disputas vanas.
A veces soy yo quien te busca
necesitada de tu inmenso arrojo
para hacerme potente, enérgica,
contra mis adversarios más ásperos.
Y si no estoy muy atenta suelo perder mi orilla
y acabo derrotada por tu vertiginoso poder envolvente.
Cual sombra que busca las coordenadas de mis pasos
caminamos juntos a través de estos mares terrenales.
¡Extraño compañero de viaje!
Cuando llegue el fin de
esta pelicula
reiremos juntos como inseparables
amigos.
© Sol
Cerrato Rubio
No hay comentarios:
Publicar un comentario