“La vida es como una caja de
bombones, nunca sabes lo que te va a tocar”, dice Forrest Gump, un personaje
tan curioso como entrañable. Supongo que habéis visto la película, si no es así
os la recomiendo porque merece la pena. Y yo añadiría que uno también puede
elegir el bombón que va a comerse, lo que significa que no todo queda tan al
azar como parece dar a entender la frase, y que de dicha elección dependerán
múltiples factores. Por lo tanto, conviene que pensemos profundamente lo que elegimos,
una pareja con la que compartir la vida, una profesión por la que decantarse,
un partido al que votar, o una ciudad en la que vivir. Hay que pensarlo muy a
fondo. Mi padre me repetía siempre una frase que jamás he olvidado: “El mundo
es de los que piensan”. Y es cierto. Por eso hay que pensar seriamente el
bombón que debemos escoger porque de un solo instante puede depender algo tan
grandioso como el futuro.
#pensandoenaltoBlancadelcerro
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