Es un plato frío y fácil de
hacer, como los que me gustan a mí. Y eso lo sabe mi amiga Merche. Se puede
preparar el día anterior y fue lo que hizo para tener libre la mañana de este
domingo primaveral.
Andando nos fuimos al Museo
del Prado. Cada vez que vamos no podemos dejar de ver ese cuadro de Bartolomé
Esteban Murillo que emociona a mi buena amiga: La Sagrada Familia del pajarito.
Sí ese que adquirió en 1744
Isabel de Farnesio, la segunda esposa de Felipe V y madre de Carlos III. Representa
el ambiente familiar, la humilde condición de la familia de Nazaret, el Niño en
el centro juega con un perrillo que permanece atento al pájaro. Destaca la
figura de san José, la Virgen en un segundo plano se ocupa en devanar lana.
Más de media hora frente al
cuadro hasta que el hambre nos azuzó y regresamos a paso rápido para disfrutar
de este delicioso plato.
Ingredientes:
6
patatas medianas
200
gramos de bonito en aceite
1
cucharada sopera de concentrado de tomate
1
cebolla mediana
3
cucharadas soperas de aceite
Sal
Preparación:
Se cuecen las patatas sin pelar en abundante
agua con sal. Cuando estén cocidas se pelan. Sofreír la cebolla bien picada. En
un pasapuré o batidora mezclar bien las patatas, el atún escurrido, la cebolla,
el tomate. En una fuente rectangular Pirex se unta aceite a toda la base y
alrededor. Se vierte la mezcla y con el dorso de una cuchara de madera se
aprieta para que no queden huecos. A la nevera unas cuatro horas o más.
Para servir, se saca del
molde, pasando primero un cuchillo alrededor del molde y se vuelca en una
fuente que ya tiene unas hojas de lechuga. Se adorna con mayonesa y unas
rodajas de tomate. O con lo que se les ocurra.
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Arte
y Gastronomía
¡Qué
ricura!
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