Un tejedor es una
persona que teje por oficio. Surge por la necesidad humana de protegerse del
frío, de la lluvia… En el neolítico se comenzó a hilar el lino para el verano y
la lana para el invierno. El huso y el telar son inventos del neolítico.
En China ya se fabricaban tejidos de seda alrededor del año 3000 a.C. Los egipcios también lograron obtener telas de lino y de algodón. En México, los indígenas fabricaban sus telas del algodón y de las fibras sacadas y tratadas del maguey.
Se cree que este apellido se originó en la región de Castilla, España, allá por el siglo XV. Su significado se refiere a ese oficio tradicional que consistía en tejer telas a mano para vestir a nobles y plebeyos.
Esta profesión era muy común durante la Edad Media y el Renacimiento, y los tejedores eran muy respetados en la sociedad.
Tejer es una forma de vida que merece ser preservada y honrada. Los tejedores se hicieron de un nombre en el mundo de la artesanía, y han pasado su conocimiento de generación en generación, lo que les ha permitido mantenerse a la vanguardia de la moda.
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