sábado, 2 de noviembre de 2019

Amantes de mis cuentos: Amor prohibido





Se enamoró de la suavidad de su piel, de su languidez y también por qué no decirlo, de esa sensación de amor prohibido, que tanto atrae, ya que era propiedad de su mejor amigo.

En silencio le cantaba bellos y excitantes boleros al no encontrar otros temas de conversación, y aprovechaba cuando se quedaba solo con ella y pasaba sus manos por aquel rostro perfecto.

La llamaba «mi Perla» y cada día sentía el dolor de no poder hacerla suya, pero eso sería traicionar a su compañero de la infancia. Su secreto acabaría en la tumba.

Aún recuerda con triste lujuria aquella mañana en que fue a contemplar la serena belleza de su amor, aquella muñeca hinchable, a la que su amigo, la noche anterior, había arrojado al contenedor sin haberle siquiera advertido.

Corrió y corrió, pero el camión de la basura ya había hecho su ronda. Visitó todos los vertederos, nada. Y sintió cómo su alma se rompía en mil pedazos, al perder el primer gran amor de su vida.



© Marieta Alonso Más


2 comentarios: