Apellido patronímico. Los
apellidos patronímicos son aquellos que se derivan del nombre de pila del padre
y, en este caso, Alonso proviene del nombre propio Alfonso, cuyo más antiguo
solar radicó en el valle de Valdivieso (Burgos), teniendo por tronco a
Desiderio, sobrino del rey Wamba que, por los años de 672 fundó este y nuevos
casales en Santander y Valladolid.
Está repartido por toda
España y en países de habla hispana. En
Asturias, León, Zamora, el apellido Alonso es muy común, en cambio en Jaén y
Melilla es menos frecuente y en Ciudad Real y Cuenca escasea.
Es nombre propio y también
apellido masculino de origen germano y tradición visigoda en su variante
castellana. Entre los godos significaba: «amado, favorecido».
En la literatura española,
Alonso Quijano era el auténtico nombre de don Quijote, personaje ficticio de la
obra maestra de Cervantes: «El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha».
Se dice que este apellido o
nombre tiene una fuerte conexión con la astrología y que se asocia con la
energía de la Luna, que simboliza la intuición, la emoción y la sensibilidad y
a la energía de Mercurio que entraña la comunicación, la curiosidad y la inteligencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario