La
única solución
Habla con la boca llena enviando al
aire salivazos y salpicaduras de alimentos. Dice que los ajos son buenos para
la salud y se toma en ayunas varios dientes. Habla francés, pero como nunca lo
estudió nadie entiende lo que dice. Al reírse deja ver los dientes careados y
como le tiene miedo al dentista no se los arregla. Se pone colonia y
desodorante, pero como no se lava el olor que deja la mezcla de fragancias es
francamente desagradable.
Con ella no se puede vivir, y si no
podemos vivir juntos y yo no creo en el divorcio, ¿qué otra cosa podía hacer
sino quitarla de en medio? Y eso es lo que hice, señor Juez.
Conversaciones con el Juez: Una vida feliz por Malena Teigeiro se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivar 4.0 Internacional.
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