Mostrando entradas con la etiqueta Colaboradores: Lu Xuan Calleja. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Colaboradores: Lu Xuan Calleja. Mostrar todas las entradas

miércoles, 20 de septiembre de 2023

Lu Xuan Calleja Romeralo: Amigos para siempre


  

Había una vez un niño llamado Aristóteles que nació en el año 384 a.C., en la ciudad de Estagira, en Grecia. Era rubio de pequeño, tenía ojos claros, y muy alto. Iba a un colegio cerca de su casa situada en la ciudad donde nació. La asignatura favorita de Aristóteles era filosofía, además tenía a un gran maestro, Platón.

Platón fue un filósofo griego seguidor de Sócrates. Fundó la Academia de Atenas, a la que Aristóteles acudiría desde Estagira a estudiar. Esto lo dijo mi profesora el otro día en clases.

Una mañana, a la hora del almuerzo, Aristóteles se sentó en la escalera de su colegio a comer un bocadillo que le había preparado su madre. Al cabo de un rato, su amigo Juan se acercó a él, vio q estaba solo, y empezaron a hablar. Juan le preguntó a Aristóteles qué quería ser de mayor. Su respuesta fue: filósofo.

Aristóteles todavía no se había terminado su emparedado, cuando vio a Juan con la boca abierta, relamiéndose. Entonces decidió compartir su merienda con él. A continuación le preguntó a Juan qué quería ser de mayor, y este le contestó que le gustaría ser matemático. A Aristóteles también le gustaba mucho la ciencia, pero prefería la filosofía.

Años más tardes, ambos consiguieron su sueño, Aristóteles fue filósofo y Juan matemático. Perdieron el contacto, hasta que un día, Aristóteles por sus grandes conocimientos de filosofía, se hizo profesor en su antigua escuela de Atenas. Lo que él no sabía era que Juan también daba clases en esa misma escuela. En una reunión de profesores coincidieron, se miraron y con un fuerte abrazo volvió a renacer su amistad.



© Lu Xuan Calleja Romeralo

13 años

jueves, 10 de agosto de 2023

Lu Xuan: El agua, mi alegría

 



 

El agua del río que fluye rápida

tanto como la sangre por mis venas.

El agua que limpia heridas externas,

bebemos, no nos damos por vencidos.

 

Sin el agua habríamos sufrido,

las verdes plantas serían morenas.

Sin el agua habría más faenas,

y la flora habría disminuido.

 

Con ella la vida es mucho más fácil.

Con ella el cuerpo humano funciona.

Con ella me muevo de forma ágil.

 

Velero que a los ríos secciona,

el agua en la cascada va muy hábil,

ella nos da la alegría eterna.

 

© Lu Xuan Calleja Romeralo

sábado, 26 de septiembre de 2020

Lu Xuan Calleja Romeralo: El misterio de la basura

 


Había una vez un grupo de cuatro amigos y un planeta a varios kilómetros de ellos. Se preguntaban qué habría allí. Todos los días cuando iban al colegio se encontraban toda la calle llena de basura… ¿Quién hacía eso?

Entonces decidieron que todas las tardes después de clases quedarían en el parque que había al lado del colegio para investigar. Esa misma noche se quedaron dos despiertos y los otros dos dormidos, se turnaban, uno de los dos despiertos oyó un ruido, se había movido algo, pero era una bolsa de plástico que se la había llevado el aire. Unos minutos más tarde se volvió a oír…

¡¡¡Eran los que tiraban la basura!!!

Los que estaban despiertos despertaron a los que estaban dormidos y se fueron corriendo a preguntarles por qué hacían eso, pero se fueron y no les dio tiempo a reaccionar.

Al día siguiente se lo contaron a sus padres solo que no se lo creyeron porque decían que no eran humanos sino que eran un tipo de monstruos.

A la siguiente noche se quedaron vigilando de nuevo y...

¡¡¡Eran ellos!!! Eran los de la basura.

Esta vez fueron más sigilosos, les rodearon y les preguntaron:

−¿Por qué tiráis la basura aquí todas las noches?

Y les respondieron:

−Es que nuestro planeta es el que está a varios kilómetros de aquí y está lleno de basura. No podemos vivir porque no hay oxígeno, tenemos la nave y trajes espaciales con el que podemos respirar. Estamos haciendo hueco para plantar árboles y construirnos casas para vivir mejor.

−Está bien, pero no nos la tiréis a nosotros porque vuestro planeta se quedará limpio pero el nuestro no. En nuestro planeta tenemos árboles y fábricas de reciclaje. Nosotros hemos aprendido a reciclar la basura. Os podemos enseñar cómo hacerlo. Y les enseñaron a plantar árboles y fabricar cosas con material reciclado.

Al día siguiente se lo contaron todo a sus padres y seguían sin creérselo. Al final les presentaron y ya por fin se lo creyeron y fueron amigos para siempre porque les ayudaron.

FIN

 

 

© Lu Xuan Calleja Romeralo

10 años

miércoles, 6 de mayo de 2020

Lu Xuan Calleja Romeralo: Mi amigo el fantasma



Había una vez un largo y ancho camino que llevaba a una casa en ruinas rodeada de árboles. Para llegar a ella se necesitaba pasar una niebla muy profunda.

Una noche muy oscura, sin luna, un niño se perdió. Quería pedir ayuda, no sabía qué hacer. Estaba solo.

Cuando llegó al final del camino vio la puerta abierta de la casa en ruinas. Tocó y dijo: ¡Hola! ¿Hay alguien ahí? De repente algo pasó muy rápido entre los árboles. Se asustó. Y entró en la casa. Todo estaba muy oscuro. Sintió un ruido y vio a un pequeño fantasma escondido debajo de una mesa, tenía mucho miedo.

El niño fue despacito hacia el fantasma para no asustarle y se sentó a su lado. El fantasma le prestó uno de sus juguetes y le dijo que no tenía mamá y que el papá se había ido a otro lugar muy lejos y no sabía cuándo iba a volver.

El niño le dijo que no se preocupara.

Y cuando sus padres los encontraron compraron y reformaron la casa en ruinas y fueron amigos para siempre.



© Lu Xuan Calleja Romeralo




Una tarde de verano, en la playa, a orillas del Mediterráneo, tres niños de 9, 11 y 13 años, decidieron escribir sobre fantasmas, una casa en ruinas, y un camino cubierto de niebla.


¿Qué edad tenía Lu Xuan?