viernes, 18 de abril de 2014

Pablo Gargallo (Maella, Zaragoza, 1881 - Reu, Tarragona, 1934)

Pablo Gargallo






Escultor y pintor español. Fue discípulo de Jacinto Arnau y de la Escuela de Bellas Artes de Barcelona. A los diecisiete años expuso su primera obra, en la Exposición Internacional de Barcelona en 1898, un relieve en yeso, titulado En la artesa, hoy en el Museo Nacional de Arte de Cataluña. En 1904 luego de una exposición de sus obras en la que ya se advertían audaces destellos, marchó a París, donde permaneció por espacio de diez años. La obra de Rodin le impresionó. Entró en el círculo de Picasso, cuyas obras cubistas le atrajeron. A su regreso fue profesor de Escultura en la Escuela de Bellos Oficios de Barcelona. Su obra, de una gran repercusión mundial, tuvo al cubismo como punto de partida. Intentó constantemente resolver difíciles problemas, en desacuerdo con las normas tradicionales.

En 1924 retorna a París donde se establece definitivamente.  Fue una personalidad en la escuela de París. Con la rolliza corporeidad de muchas de sus figuras talladas directamente en piedra con el juego de planos de sus expresivas estatuas en plancha de hierro, consiguió plasmar, con un lenguaje muy personal, las aspiraciones artísticas de su época.
Torso de mujer, 1915

En su producción se alterna el realismo más depurado con la invención, el análisis y la reestructuración de los elementos escultóricos, siguiendo unos ritmos compositivos de alternancia de macizos y huecos. Fue junto al ruso Antoine Pevsner, el primero en hacer que estos últimos desempeñasen un papel capital en la expresión de los volúmenes que confieren un nuevo y acusado sentido a la representación plástica de las formas. 

En 1985 se inauguró el Museo Pablo Gargallo en el Palacio Arguillo de Zaragoza.

Entre sus obras:

El profeta

El profeta de 1933, en bronce, conjuga el volumen y el vacío. Posee una gran energía de carácter expresionista. Representa un orador gritando con el brazo levantado mientras sujeta un bastón en actitud amenazadora. Fue adquirida por la Diputación Provincial de Zaragoza en 1973 y cedida al Museo Pablo Gargallo.

La diablesa blanca, escayola, hoy en paradero desconocido, fue medalla de segunda clase en la VI Exposición Internacional de Arte, del Ayuntamiento de Barcelona.

El violinista está hecho de planchas de plomo sobre un alma de madera. Tiene problemas debido a la incompatibilidad entre los dos materiales. Para conocer el interior del Violinista se ha recurrido a la radiografía de neutrones. El análisis ha confirmado la corrosión por carbonatación, una degradación debida a los compuestos orgánicos volátiles emitidos por la madera. Se conserva en el Museo Nacional de Arte de Cataluña. La obra fue adquirida en la Exposición de Arte de Barcelona de 1920.
Gran bailarina



Gran bailarina, de hierro recortado, París, 1929. Museo Nacional de Arte de Cataluña. El artista hará del vacío escultórico su forma de modelar el volumen. La luz no la extrae del exterior sino que surge a través de la apertura de huecos y vacíos en la fisonomía de la pieza, a partir de la ausencia de masa. El resultado es de una enorme expresividad.

Picasso



Pablo Picasso, 1913, escultura en bronce. Obra en que la expresión está acentuada hasta rozar lo caricaturesco. 




Y muchas más.
David






Fuente: Wikipedia, la enciclopedia libre





Kiki de Montparnasse

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