La pasta es una masa cuyo ingrediente básico es la sémola, mezclada con agua, a la cual se le puede añadir sal, huevo u otros ingredientes, y que se cuece en agua hirviendo.
Se
han desenterrado lo que llaman «los fideos más antiguos que se conocen» con
casi cuatro mil años de antigüedad. Son delgados, amarillos, miden 50
centímetros de largo y están hechos de un mijo originario de China. Se
descubrieron en un tazón de barro sepultado bajo una capa de sedimento de tres
metros de espesor cerca del río Amarillo en el noroeste de China.
En el
sur de Anatolia —en las ruinas de una de las ciudades más antiguas
del mundo: Hattusa— se han encontrado restos de platos con una especie de
pasta hecha a base de granos locales, por lo que es posible que también
los Hititas desarrollaran algún tipo de pasta alimenticia, de manera
igualmente independiente.
El
origen de la pasta italiana es diferente al asiático. Las investigaciones
históricas adjudican el origen de la pasta, a la antigua civilización etrusca,
siglo IX a.C.
Cuando
los griegos fundaron Nápoles adoptaron un plato que hacían
los nativos y consistía en una pasta de harina de cebada y agua que luego
secaban al sol. En la antigua Roma, también se encuentran referencias de
platos de pasta a partir del siglo III a.C. De hecho, el propio Cicerón,
político y orador romano, habla de su pasión por unas tiras de pasta largas que
aún hoy en día se las conoce con el nombre de làgane, pasta primordial de
la cual derivaron las posteriores.
El
hecho de que en el capítulo CLXXI de Los viajes de Marco Polo se haga
referencia sobre el uso de la pasta en China, ha generado la leyenda de que fue
Marco Polo, en 1271, quien la trajo a Italia desde China. Sin embargo, no
coincide con la realidad histórica, dado que las referencias más antiguas a la
pasta italiana, tal como la conocemos hoy en día y en particular, los spaghetti,
derivados a su vez del láganum de época romana, datan del año 1152,
un siglo antes. Por eso lo historiadores coinciden en que la pasta fue generada
de manera paralela, independiente y diferente, tanto en Italia como en China,
sin que una sea derivada de otra, siendo las dos, alimentos distintos y no
relacionados entre sí.
La
forma de elaborar pasta italiana a base de harina de trigo y sus recetas son
las que se han extendido primero por Europa y luego por América.
Ingredientes:
400
gramos de macarrones, o tallarines o spaghettis
200
gramos de salchichas
300
gramos de champiñones laminados
1
lata de tomate triturado natural
1
cebolla
1 zanahoria
Hierbas
aromáticas, aceite de oliva, sal.
Preparación:
Cortar la cebolla y la zanahoria y a pochar en una cazuela
con un poco de aceite.
Añadir los champiñones y las salchichas cortadas en
trocitos. Unos cinco minutos y agregar el tomate y las hierbas aromáticas.
Mientras tanto cueza la pasta
al gusto y la mezcla en la misma cazuela de la salsa.
Un día que no teníamos ni
chorizo, ni salchichas, ni atún, cortamos fuet en trocitos pequeños y no vean
lo rico que quedó.
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